Hola astrolovers, hoy hablaremos de uno de los principales aspectos en nuestra carta natal.
La Oposición se da cuando dos planetas se encuentran a una distancia de 180 grados, vistos desde la Tierra naturalmente, con un orbe que puede variar entre 8 y 10 grados según los planetas que lo formen (se sitúan en la carta uno frente al otro). Es un aspecto tenso que claramente implica conflicto, choque, enfrentamiento, aunque también puede conllevar un significado de colaboración o complementariedad que es el fin que se busca para obtener balance.
Los signos y casas tiene un opuesto y cuando tenemos una oposición en nuestra carta solemos identificarnos con la energía de uno de los planetas, y tendemos a rechazar la del otro, que, generalmente, suele proyectarse al exterior. A veces, podemos sentirnos empujados en dos direcciones distintas, u oscilar entre los dos extremos, como ejemplo mostrarnos en algunos momentos dulces y cariñosos y en otra iracundos o explosivos.
Las oposiciones pueden afectarnos en la manera en la que nos relacionamos con el mundo y con las personas, pero a la larga se trata de una tensión enriquecedora, que ayuda a que seamos capaces de ver las dos caras de una misma cosa, a ser más objetivos y consciente de la realidad.
Como ejemplo, si una persona tiene una oposición entre Venus en su casa primera y Marte en la casa séptima, será probablemente sociable y pacífica, pero puede atraer inconscientemente a una pareja de carácter violento o colérico.
En el aspectario lo identificamos de la siguiente manera:
En la carta natal lo podemos identificar de la siguiente manera:
Te dejo este pequeño esquema para que te sea más fácil comprenderlo.
- Polaridad, pugna y conflicto.
- Los conflictos se generan cuando hay proyecciones de partes no reconocidas del yo; la energía y el aumento de conciencia se producen cuando se reconocen e integran las partes proyectadas.
- Resistencia, nos hacen crecer porque nos dan una lección y propicia una gran evolución.
- Se pelean los planetas la primera mitad de la vida.
- ROJO es el color en el que podemos identificarlo en la carta astral y se sitúa justo en el centro de la circunferencia.
