Hola astrolovers, hablemos de la felicidad, esa palabra mágica que todo mundo buscamos encarecidamente y parece que es tan difícil de encontrar.
Yo veo la vida como una carretera con hermosos paisajes para disfrutar, incluso en las zonas más áridas podemos voltear al cielo y maravillarnos, ver las aves, las mariposas o a la lejanía alguna montaña, lo importante es encontrar algo que nos sorprenda, por supuesto en este recorrido hay tramos en recta, de pronto algunos baches y están los tramos con curvas, algunas fáciles de tomar y otras demasiado cerradas. Nosotros somos ese coche que en algunos momentos va acompañado de muchos coches, otros no tanto y otros vamos solos.
Todos nacemos con las mismas posibilidades de hacer realidad nuestros sueños, la diferencia radica en que cada uno responde de una manera diferente a la zona de curvas que se nos presentan en el camino y eso incluye a personas que te atan, te frustran, te invaden, siempre y cuando tú lo permitas.
Algunos desperdician gran parte de su vida al vivir obsesionados con el mañana, con el futuro, con lo que está por venir y no se dan cuenta que ese mañana cuando llega es presente, por eso la importancia de vivir en el aquí y el ahora. Cuántas veces hemos sufrido por no obtener lo que deseamos sintiéndonos frustrados y al pasar el tiempo nos damos cuenta de que a veces lo que deseamos no es siempre lo que nos conviene.
La felicidad es diferente para cada persona y parece estar atada siempre al deseo de algo, si logramos tenerlo, somos felices, pero esa felicidad es momentánea porque proviene de algo externo, dura muy poco lo que disfrutamos porque enseguida estamos pensando en lo que sigue que nos hace falta para seguir siendo felices.
Debemos aprender a buscar la felicidad dentro de nosotros y nos daremos cuenta de que esta es eterna, es muy bueno tener sueños e ilusiones, pero para poder disfrutarlos debemos estar nutridos por dentro, recuerda que la actitud ante lo que pase depende del punto de vista con que la miras.
Debemos aceptarnos como somos, cuanto más nos castigamos, menos podemos cambiar, reconocer como somos en realidad nos permite introducir los ajustes necesarios desde la paciencia y la comprensión, todo esto lo logramos habitándonos, amándonos.
Dejemos de caer en la trampa de demostrar lo que tenemos y lo que no tenemos, mejor aprendamos a decir NO cuando no queremos hacer algo, aprendamos a cuidarnos respetando nuestros tiempos.
Empezar a transitar por el camino de la búsqueda, requiere mucha paciencia para poder encontrar respuestas a nuestros porqués, es un camino sin retorno porque siempre queremos saber más y más, y si bien puede ser un camino agotador, a la larga, la riqueza interior que logramos tener nos colmará el alma y seremos felices.
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